El descontento generalizado contra el régimen de Boluarte, que mantiene al país en vilo y bajo una ola de protestas desde el pasado 7 de diciembre, cuando fue destituido y encarcelado el expresidente Pedro Castillo, ha radicalizado la crisis política e institucional en Perú, que tras más de un mes de manifestaciones contabiliza medio centenar de fallecidos por la fuerte represión de la fuerza pública.