McDonald's es la última de varias marcas en informar una caída en las ventas en Asia y Medio Oriente.
La empresa de comida rápida es sólo una de varias marcas estadounidenses afectadas por boicots y protestas por su supuesto apoyo a la guerra de Israel en Gaza. En las redes sociales circulan listas de marcas acusadas de apoyar a Israel, aunque los vínculos a menudo no se explican claramente. La iniciativa es parte de una campaña más amplia de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) dirigida a marcas amigas de Israel desde 2005.